El sistema pensional colombiano presenta un notable rezago en las tasas de cobertura y en el número de adultos mayores que reciben una pensión contributiva.
Solo el 49 % de los adultos mayores en Colombia reciben algún tipo de ingreso como protección en su vejez.
En el capítulo «Pensiones» del Informe nacional de competitividad 2021-2022, el Consejo Privado de Competitividad –CPC– analiza la cobertura del sistema pensional colombiano.
Al evaluarlo, la entidad indica que es preciso tener en consideración dos aspectos que se interrelacionan:
El sistema colombiano presenta un notable rezago en ambas coberturas. Desde la arista de la cobertura activa, el promedio de cotización en 2020 fue del 37 %, ligeramente por debajo del promedio de América Latina (39 %) y notablemente inferior a otros países de la región como Uruguay (70 %), Costa Rica (67 %) o Chile (65 %).
Según datos del Ministerio del Trabajo, al desagregar las cifras geográficamente, el porcentaje de trabajadores colombianos cotizantes al sistema llega al 44 % a nivel urbano, y al 13,9 % en zonas rurales.
La cobertura del sistema pensional tiene una estrecha relación con la estructura del mercado laboral. Esto indica el informe:
Factores históricos como el desempleo y la alta informalidad, además de los requisitos mínimos de cotización, restringen la posibilidad de aportes al sistema pensional, situación agudizada como consecuencia de la crisis económica derivada del COVID-19.
Estos rezagos en la cobertura activa llevan ineludiblemente a un resultado proporcional en la fase de desacumulación o cobertura pasiva.
Históricamente, el país ha tenido incrementos marginales en el porcentaje de adultos en edad de jubilación que reciben una pensión.
En 2020 este cambio fue negativo, pasando del 24,5 % al 23,9 %, con una profundización mayor en las áreas urbanas y especialmente para los hombres. Por el contrario, en las áreas rurales se presentó un leve aumento en las tasas de cobertura pensional.
Así mismo, al separar esta cobertura por sexo y zona, se evidencian marcadas brechas. Mientras que casi el 30 % de los hombres en edad de jubilación accedieron a pensión en 2020, esta cifra fue del 20,7 % para las mujeres, diferencia que se agudiza en el sector rural, donde solo el 6 % de las mujeres reciben una pensión contributiva.
Indica el informe:
Las cifras de cobertura divergen de acuerdo con la metodología empleada, el período observado y el criterio de selección de edad de pensión. Según el cálculo realizado por el BID, que incluye a las personas de 65 o más años que declaran un monto recibido por pensión contributiva, Colombia se ubica en el lugar once en América Latina con un 20,5 % de cobertura, cifra inferior al promedio de la región (39 %) y muy por debajo de países como, Uruguay y Brasil, cuyas coberturas sobrepasan el 80 %.
De los 6,8 millones de adultos en edad de jubilación, 1,6 millones acceden a pensión contributiva. Al sumar los 1,7 millones de beneficiarios del programa Colombia Mayor y los 31.000 beneficiarios de BEPS, se tiene que solo el 49 % de los adultos mayores en Colombia reciben algún tipo de ingreso como protección en su vejez.
Esta situación se agudiza a raíz del aumento de la pobreza en las personas mayores tras la crisis derivada del COVID-19.