La tasa de tributación depurada –TTD-, incorporada en el parágrafo 6 del artículo 10 de la Ley 2277 de 2023, es una adopción tomada del pilar 2 de la OCDE, genera preocupaciones para los pequeños empresarios colombianos.
Para Juan Carlos Arbeláez, el principio de equidad y progresividad, que busca que la carga tributaria se distribuya según la capacidad económica de cada contribuyente, se ve desafiado por la TTD pues al establecer una tasa del 15%, no se distingue entre empresas de diferentes tamaños o realidades económicas.
En este contexto, las pequeñas y medianas empresas colombianas, que constituyen el núcleo de la economía nacional, podrían verse desproporcionadamente afectadas, poniendo en riesgo su viabilidad.
No hay que olvidar que estas empresas bajo ningún concepto son multinacionales y por tanto no deberían ser objeto de una medida cuyo fin fue otro muy diferente.
Juan Carlos Arbeláez
Es Abogado, especialista en Derecho Comercial y Derecho Tributario. Magister en Derecho de la Empresa y de los Negocios. Actualmente, socio de Impuestos y Servicios Legales de Crowe Colombia.