Cada afiliado que cotiza a pensión tiene una cuenta de ahorro individual a su nombre donde acumula el dinero que mes a mes aporta, más los rendimientos.
Si el afiliado llegara a fallecer, su ahorro pensional podrá ser recibido por sus herederos hasta el quinto grado de consanguinidad.
Se puede asegurar que la pensión es el ahorro más importante en la vida de cualquier trabajador. La idea es que este ahorro, pensado a largo plazo, le permita a los cotizantes del sistema pensional contar con tranquilidad financiera al momento del retiro laboral.
Con este ahorro se pueden cubrir necesidades básicas por 20, 30 o más años, así como disfrutar de aquello que se construyó con esfuerzo y disciplina.
Desde la AFP Colfondos se advierte que existe una falsa creencia de que aportar a pensión es simplemente un descuento de nómina o una obligación legal, y nunca llegaremos a pensionarnos.
Frente lo anterior, hay que aclarar que no se trata únicamente de una parte de dinero que sale del sueldo, ya que le permite a cada persona disfrutar de algunos beneficios.
María Lorena Botero, gerente de beneficios pensionales de Porvenir, afirma que la gran mayoría de colombianos no conocen los beneficios con los que se cuentan por realizar aportes obligatorios a pensión:
Se puede recibir el pago de incapacidades al sufrir una enfermedad; un auxilio funerario por el fallecimiento de un pensionado o afiliado; y alcanzar una pensión de invalidez o sobrevivencia, protegiéndose a uno mismo o a su familia en caso de fallecimiento.
Desde el punto de vista de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos ‒OCDE‒, para tener una vejez tranquila en el ámbito financiero, es necesario que una persona ahorre el 18 % de lo que ha ganado toda la vida.
A través de la Ley 100 de 1993, el Gobierno nacional dio luz verde para que los colombianos que cotizan en los fondos privados realicen aportes adicionales y voluntarios a pensión obligatoria, con el fin de que, cuando llegue el momento de pensionarse, puedan contar con una mesada que les permita tener una mejor calidad de vida en la vejez.
Entre más joven sea el afiliado cuando comience a realizar este tipo de aportes, mejor podrá ser el monto de su pensión o mayores serán las posibilidades de acceder a una pensión anticipada. Por ejemplo, un hombre de 34 años que gana mensualmente 2,9 millones de pesos y realiza aportes voluntarios a pensión obligatoria por $250.000 hasta los 62 años logrará un incremento del 20 % en su mesada pensional.