Mintrabajo presentó estrategia para impulsar formación de jóvenes en aulas y ambientes de trabajo

Esta modalidad aplica en centros formativos y en empresas mediante un sistema de alternancia. Puede implementarse para jóvenes en el ámbito profesional, empresarial y universitario.

El Ministerio del Trabajo y el Programa EUROsociAL+ lanzaron la estrategia nacional para el fomento de la formación dual en las empresas del país, para promover la pertinencia de la formación según las necesidades del sector productivo, enfocado en jóvenes.

“Con esta iniciativa consolidamos el talento humano del país e impulsamos una oferta robusta que contribuya a la empleabilidad juvenil, la productividad y la competitividad de las empresas”, afirmó Andrés Felipe Uribe, viceministro de empleo y pensiones.

La formación dual es un referente obligatorio del subsistema de formación para el trabajo, que se enfoca en brindar a los estudiantes más horas de formación práctica en las empresas, lo que permite al futuro trabajador un mayor acercamiento al mundo real del trabajo mientras se está formando.

Para el viceministro la formación dual se consolida como una herramienta fundamental para afrontar el reto del desempleo juvenil en Colombia “la alternancia desde las etapas más tempranas de la formación para el trabajo es esencial para el desarrollo de las competencias necesarias para la efectiva transición de la escuela al trabajo, que además les brinda experiencia profesional certificada a los recién egresados”.

La formación dual permite a los futuros trabajadores recibir formación y aplicar de manera directa los conocimientos que van adquiriendo al interior de la empresa y a los empleadores contar con talento humano idóneo para el desarrollo de sus funciones.

Los alumnos de este programa entran en contacto con el mundo real de la empresa y adquiere experiencia profesional (Ley 2039 de 2019 y Decreto 616 de 2021); aprenden directamente en un entorno laboral y la experiencia profesional es acreditada; comprueban de forma práctica si aquello para lo que se ha formado se ajusta a su perfil, intereses y competencias.

Por su parte las empresas conocen y forman a potenciales empleados, con conocimientos teóricos aplicados en la práctica; forma a los aprendices según las necesidades reales; permiten adaptar los contenidos formativos a las necesidades de un mercado de trabajo en cambio permanente; disminuir los costes de selección de personal y es una inversión rentable.

Fuente: Ministerio del Trabajo.