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La Generación Z de contadores exigirá una mayor rendición de cuentas por parte de los líderes de las organizaciones para las que trabajan.
De igual forma, tendrán altas expectativas entre el ambiente laboral en el que se desempeñan y el equilibrio familiar.
Tendrán un gran impacto en la profesión contable.
Estamos en una época de oportunidades laborales donde los jóvenes con talento se sienten atraídos por carreras universitarias que les transmitan satisfacción, y así marcar una contribución y diferencia. La pregunta que se plantea el informe Groundbreakers: Gen Z and the future of accountancy, publicado por la Asociación de Contadores Públicos Colegiados -ACCA, por su siglas en inglés- es ¿dónde se ubica la contabilidad en este contexto?
Las empresas toman decisiones difíciles, deciden dónde invertir y dónde no, equilibran las metas a corto con las de largo plazo. Las buenas organizaciones entienden que las acciones tienen consecuencias. «Los buenos negocios están enfocados en tener una economía sostenible y un planeta sostenible, impactando positivamente a la sociedad y el medio ambiente», indica el informe.
Para ACCA, la profesión contable tiene una brillante oportunidad para desempeñar su papel en esta historia, ayudando a las organizaciones a ser sostenibles y resilientes a largo plazo, mediante la realización de
trabajos en el «corazón del negocio» que realmente marcan la diferencia.
Es en este punto donde se abre la ventana para los contadores públicos pertenecientes a la Generación Z. A medida que el trabajo se transforma, los expertos en tecnología de esta generación tendrán su vida conectada, digitalmente, al lugar de trabajo y ayudarán a los negocios para que se vean cambios para mejorar.
«Este tipo de profesional contable exigirá una mayor rendición de cuentas por parte de los líderes de las organizaciones para las que trabajan. De igual forma, tendrán altas expectativas entre el ambiente laboral en el que se desempeñan y equilibrio familiar», destaca la publicación.
También velará por el bienestar de los empleados, ayudará a crear una fuerza laboral más diversa, inclusiva y hará que las empresas sean más conscientes de su amplio papel en la sociedad.
«Este es una generación verdaderamente pionera en el trabajo. A largo plazo es probable que tengan un gran impacto en la profesión contable. Será un catalizador del cambio en la profesión como ninguna otra generación lo ha sido. Se trata de un grupo de jóvenes deseosos de aprender», resalta ACCA.
Desde el punto de vista de la publicación, este grupo de contadores ayudarán a reformular por completo lo que es ser un contador. «Así como la Generación Z dará a los negocios y a la profesión, los negocios y la profesión retribuirán».
Las cualidades fundamentales de la contabilidad perdurarán porque las finanzas son el lenguaje universal de los negocios. A medida que la tecnología redistribuye las responsabilidades, el trabajo, los procesos y las actividades serán rediseñadas, combinando esfuerzo humano con capacidades digitales emergentes en una profesión cada vez más conectada.
«Las habilidades, las ganas de seguir capacitándose, el conocimiento de los negocios, harán que los contadores públicos de la Generación Z se destaquen. Contarán con oportunidades para el aprendizaje continuo y la adquisición de nuevas capacidades, lo que hará que su campo de acción se diversifique», afirma ACCA.
La propia Generación Z continúa cambiando, independientemente de su rol, sector, industria o geografía. «En un mundo económicamente sacudido en este momento, parece que la contabilidad sigue siendo una apuesta bastante buena», concluye la publicación.
Fundada en el año 2000 con la misión de “elevar el nivel profesional del Contador Público”
