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José Vicente Bermúdez, director del programa de contaduría pública de la Universidad Libre, asegura que los contadores deben participar activamente en las campañas de responsabilidad administrativa de las empresas, especialmente, de las estatales donde los hechos de malos manejos son evidentes.
José Vicente Bermúdez, director del programa de contaduría pública de la Universidad Libre, afirma que recuperar la confianza y la credibilidad, son los principales retos que deben enfrentar los contadores públicos y revisores fiscales del país. Así lo concluye un reciente informe realizado por esta institución educativa.
«Los casos de corrupción y malos manejos que han contaminado las finanzas de las empresas del sector público y privado, han dejado un manto de duda sobre la transparencia y ética de estos profesionales que, como principal desafío, deben fortalecer la confianza que en ellos depositan los colombianos», dice Bermúdez.
“De la transparencia de su trabajo depende la integridad de los documentos financieros que hoy llegan a manos de los inversionistas, entes de control, el Gobierno y los usuarios”, agrega.
Otros retos de la profesión, según Bermúdez, tienen que ver con el conocimiento de las normas internacionales de contabilidad y auditoría, el manejo de la tecnología y el dominio del inglés.
Según cifras del informe, el cual se realizó junto a la Junta Central de Contadores, en Colombia existen cerca de 237.500 contadores públicos activos. En cuanto al número estudiantes que cursan esta carrera, se calcula que, en los últimos tres años, se han graduado 53.000 personas, según el observatorio laboral de la educación –OLE–.
Entre los principales desafíos técnicos que tienen que superar estos profesionales, el informe destaca el conocimiento y la permanente actualización que deben tener de los Estándares Internacionales. “Tarea no menos importante, si se tiene en cuenta que el 98 % de las organizaciones colombianas son pymes, según la Cámara de Comercio de Bogotá; y que siete de cada diez contadores públicos trabaja en este tipo de compañías, según indicadores del Instituto de Contadores de Colombia, que agremia a, por lo menos, 20.000 profesionales de esta área del conocimiento”, recalca Bermúdez.
En cuanto a otras competencias que deben adquirir los contadores públicos y revisores fiscales, Bermúdez resalta la importancia de que estos profesionales transciendan de los conocimientos que adquirieron en la universidad, para que logren ser menos operativos y más estratégicos. “Deben estar capacitados para ser administradores de primera clase, asesores de negocios, buenos comunicadores, analistas financieros y negociadores influyentes”, dice.
Frente a los hechos de corrupción que han contaminado la profesión, el informe enfatiza la importancia de que todos los contadores participen de manera activa en las campañas de responsabilidad administrativa de las empresas, especialmente, de las estatales donde los hechos de malos manejos son evidentes.
Uno de los principales problemas que hoy comprometen a los profesionales son las responsabilidades que el Estado les ha asignado, lo que hace que su trabajo se vea comprometido en situaciones de riesgo por las presiones que tienen que enfrentar en su entorno. “Pueden pasar por alto el flujo de dinero ilegal, lavado de activos, legalización de fortunas mal habidas, la triangulación empresarial y estados financieros maquillados, sin sustentaciones físicas ni razonables”, explica Bermúdez.Según el informe, el promedio de los contadores públicos y revisores fiscales en Colombia tiene un sueldo entre 2 y 6 millones de pesos mensuales. Un profesional senior de este campo, con al menos 15 años de experiencia en cargos directivos, bilingüe y con posgrado, puede alcanzar un salario máximo de $10.000.000, mientras que un recién graduado comienza ganando $1’132.905, aproximadamente.
Datos del estudio Guía de Mercado Laboral 2016, realizado por Hays Colombia, indican que, los salarios de los contadores públicos que ocupan cargos como gerentes de contabilidad y/o de impuestos, devengan un sueldo mensual entre $10.000.000 y $18.000.000; los jefes financieros, contables o de impuestos, entre $6.000.000 y $10.000.000; contadores o analistas entre $3.000.000 y $6.000.000.
En cuanto a los profesionales más jóvenes, según cifras del OLE, su ingreso promedio está en $1.652.113 para los hombres; y de $1.691.068 para las mujeres.
Fundada en el año 2000 con la misión de “elevar el nivel profesional del Contador Público”
