El uso de estas salas no exime al empleador de reconocer y garantizar el disfrute de la hora de lactancia. Las empresas privadas con capitales iguales o superiores a 1.500 salarios mínimos, así como las que no alcancen ese monto pero tengan más de 50 empleadas, están obligadas a cumplir la norma.
Junto a la ampliación de la licencia de maternidad, Ley 1822 del 4 de enero de 2017, el presidente de la República también sancionó la Ley 1823 del 4 de enero de 2017, mediante la cual se adopta la estrategia Salas Amigas de la Familia Lactante.
La iniciativa propuesta por Clara Rojas, representante a la Cámara por Bogotá del Partido Liberal, busca que cientos de colombianas puedan cumplir los períodos de lactancia desde sus trabajos.
De esta manera, las entidades públicas y las empresas de más de mil empleados tendrán dos y hasta cinco años, respectivamente, para adecuar dichas salas.
Al respecto, Rojas manifestó que “la ley atiende el clamor de las madres trabajadoras colombianas, los múltiples beneficios nutricionales que tiene la leche materna ayudan al sano crecimiento y a prevenir diversas enfermedades en el menor, lo cual reduce los gastos y congestión en el sistema de salud, así como da tranquilidad a las mujeres en el trabajo, lo que incrementa la productividad”.
Las entidades públicas del orden nacional y territorial, del sector público y descentralizado, así como las entidades privadas, deberán acondicionar un espacio digno para que las mujeres trabajadoras en período de lactancia puedan extraer la leche materna y asegurar su adecuada conservación durante la jornada laboral.
Las empresas privadas con capitales iguales o superiores a 1.500 salarios mínimos, así como las que no alcancen ese monto pero tengan más de 50 empleadas.
El Ministerio de Salud y Protección Social establecerá los parámetros técnicos para la operación de estas Salas Amigas en un plazo no mayor a seis meses a partir de la entrada en vigencia de la Ley 1823 de 2017.
Las entidades públicas y las privadas con más de 1.000 empleados dispondrán de dos años para realizar las adecuaciones físicas necesarias, mientras que las privadas con menos de 1.000 empleados tendrán cinco años para ello.
El Ministerio de Hacienda determinará los beneficios, alivios e incentivos tributarios otorgados a las empresas privadas que adopten las Salas Amigas de la Familia Lactante.