Con la Circular externa 026 del 29 de septiembre de 2017, la Superfinanciera impartió instrucciones para facilitar el proceso de redefinición de las condiciones de los créditos entre las entidades vigiladas y los deudores que han visto afectada su capacidad de pago.
A partir del 31 de octubre de este año los deudores podrán acercarse a su entidad financiera y tramitar la modificación de sus créditos. No se trata de reestructurar una deuda, el monto de la misma tampoco disminuirá y no es una amnistía. Además, el historial crediticio no se altera ni será borrado.