En términos generales, los estados financieros constituyen uno de los informes más importantes que se derivan de la labor del contador público, pues son la base para el proceso de toma de decisiones de los diferentes usuarios.
Las políticas contables equivalen a lo que la gerencia de una entidad decide en bienestar de unos estados financieros fiables y relevantes, base para la toma de decisiones por parte de los usuarios. Publicamos una serie de recomendaciones para elegir tales políticas correctamente.
Las entidades en muchas ocasiones requieren realizar mejoras en los bienes que mantienen en arrendamiento para el desarrollo de su actividad económica. Frente a esta situación es necesario determinar si es posible reconocer estas mejoras como un activo o si deben llevarse directamente al gasto.
La sección 4 del Estándar para Pymes brinda dos opciones para la presentación del estado de situación financiera: la primera, clasificar las partidas entre corrientes y no corrientes; y la segunda, ordenarlas de acuerdo con su grado de liquidez. Explicamos cuándo resulta más conveniente cada opción.
El Estándar para Pymes permite utilizar dos modelos de medición para los activos reconocidos como propiedad, planta y equipo. La elección del modelo debe hacerse teniendo en cuenta las instrucciones establecidas en el párrafo 10.3 y los siguientes de dicha norma.
El conjunto completo de estados financieros bajo el Estándar para Pymes está compuesto en parte por el estado de flujos de efectivo. Al respecto, la sección 7 de este estándar permite dos tratamientos distintos para los intereses y dividendos pagados y recibidos, según la política contable que se elija.
Las marcas son signos comerciales que permiten identificar bienes, servicios o establecimientos comerciales en el mercado. Las entidades pueden construirlas internamente o adquirirlas de otras compañías mediante una transacción comercial. Examinamos en qué casos pueden reconocerse como intangibles.
En la actualidad, los modelos comerciales utilizados en la venta de bienes inmuebles se han orientado hacia la preventa, en lo que se conoce como “venta sobre planos”. Estas operaciones se tratan como anticipo para ambas partes, a saber, comprador y vendedor. Explicamos su contabilización.
Cuando una entidad es víctima de un hurto o fraude, el proceso contable que debe seguir puede dividirse en dos fases: la primera es la contabilización del siniestro; y la segunda, el reconocimiento de la indemnización una vez sea pagada por la aseguradora. Explicamos cómo proceder al respecto.
El efectivo es un recurso que cada entidad mantiene con una disponibilidad inmediata, en la forma de monedas, billetes y divisas. No obstante, los Estándares Internacionales permiten clasificar algunas inversiones de alta liquidez como equivalentes al efectivo, si cumplen determinadas condiciones.
Las políticas contables obedecen a las decisiones tomadas por la gerencia en pro de presentar unos estados financieros fiables y relevantes, que sirvan de base para la toma de decisiones de los usuarios. Por ello, se dice que las políticas contables definen la identidad de la entidad reportante.
Alrededor de la contabilización de los gastos pagados por anticipado existen varias inquietudes y temores por parte de los contadores, debido a que se piensa que los Estándares Internacionales no permiten que estos pagos se reconozcan como activos. Explicamos si esto corresponde con la realidad.