Papel del contador público frente a las Normas Internacionales de Auditoría

La constante actualización del conocimiento garantiza la competencia profesional del contador público, lo que es de gran importancia para el ejercicio de la auditoría ahora que han entrado en vigencia los Estándares Internacionales de Contabilidad y Aseguramiento de la Información.

Lo anterior invita a contrastar un poco el ejercicio de auditoría con las Normas de Auditoría Generalmente Aceptadas –NAGA– (Ley 43 de 1990) y las Normas Internacionales de Auditoría –NIA– (Decreto 0302 del 2015).

Principales diferencias entre las NAGA y las NIA

1. Las NAGA hacen énfasis en las actitudes éticas del contador en Colombia, mientras que las NIA se enfocan en la profundización técnica del ejercicio de la auditoría.
2. Las NAGA en Colombia no se encuentran actualizadas a la fecha y tampoco están en un proceso permanente de revisión, mientras que las NIA sí lo están.
3. Las NAGA no consideran la auditoría en ambientes sistematizados como lo hacen las NIA.
4. Las NAGA no profundizan sobre el tratamiento de los riesgos, mientras que las NIA dedican parte de sus aportes al pronóstico de estos para la planeación de auditoría.
5. Las NIA van más allá de las transacciones y los estados financieros, lo que implica un conocimiento global de la organización.

Se puede evidenciar que en las NIA se requiere de una mayor competencia por parte del auditor, ya que para abordar aspectos como el análisis del entorno, los riesgos, las estrategias, los procesos organizacionales, etc., se necesita del manejo de diferentes herramientas. Por lo tanto, la constante actualización y renovación del conocimiento por parte del contador público garantiza una buena labor en el proceso de auditoría que lleve a cabo. El rol del contador público ya no es solo documental e histórico, basando su trabajo de auditoría en evidencias financieras de hechos pasados, sino que la visión prospectiva de aspectos financieros y no financieros entran a jugar un papel importante en el desempeño de las auditorías.

En este orden de ideas, el proceso de auditoría basado en las transacciones es obsoleto frente a las dinámicas organizacionales, cada día más complejas. De tal manera se necesitan herramientas que faciliten y aporten elementos útiles para el análisis que se requiera hacer en el proceso de auditoría.

A continuación se presentan algunas herramientas de las que el auditor debería tener conocimiento, para lograr llegar a un dictamen más acorde a la realidad en la que está inmersa una organización.

Análisis PEST

El entorno es un aspecto que no se debe desconocer, ya que condiciona los procesos administrativos y operativos de una empresa. Por eso, el análisis PEST tiene en cuenta los factores del entorno político, económico, social y tecnológico en el que se desenvuelve una organización, facilitando al auditor explorar y hallar los riesgos en el presente y a futuro que condicionen, por ejemplo, la continuidad del negocio o lo que se denomina negocio en marcha.

Cadena de valor de Michael Porter

El análisis interno organizacional es fundamental para el entendimiento de las dinámicas administrativas y operativas que se llevan a cabo en una organización. El auditor podrá evaluar las diferentes actividades (primarias y secundarias) que tiene en cuenta la cadena de valor y determinar si la organización va en sintonía de los objetivos y estrategias que se han propuesto.

Informe COSO – Marco Integrado de Control Interno

A propósito de las condiciones cambiantes a las que se enfrentan las organizaciones, estas deben implementar un sistema de control que contrarreste y se encuentre preparado para dichos cambios con el fin de alcanzar los objetivos organizacionales. El Marco Integrado de Control Interno que se propone en el Informe COSO brinda herramientas para implementar un sistema de control interno efectivo que reduzca riesgos de no alcanzar los objetivos de la organización.

En conclusión, actualmente el ejercicio de la auditoría requiere de contadores públicos idóneos y capaces de desarrollar su ejercicio de manera eficaz; por tal razón el entorno está obligando al cambio de mentalidad por parte del contador público. En esta medida se abre la invitación a la actualización de manera constante, para lograr esa flexibilidad que se requiere frente a los cambios concernientes a la profesión contable; el entorno del contador público exige enriquecer el conocimiento que otorgue herramientas para el buen desempeño del ejercicio profesional.

Como reflexión, la actualización del conocimiento no se debe ver como una obligación, sino como una oportunidad para el ejercicio profesional contable.

Cordialmente,

Luis Raúl Uribe M.
CP U. de San B/tura-Cali. MG en Admón. Univalle.

*Exclusivo para actualícese.com