Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Álvaro Fonseca y Ana María Gaitán explican en Actualícese una serie de puntos que deben ser tenidos en cuenta por instituciones educativas a la hora de formar contadores públicos y que involucran a los docentes, planes y programas de estudio, y hasta el mismo Ministerio de Educación.
Álvaro Fonseca Vivas, contador público, administrador financiero y magister en docencia, director del programa de contaduría pública de la sede principal de Uniminuto, afirma en Actualícese que el compromiso por parte de las instituciones educativas a la hora de formar contadores públicos es un proceso delicado.
«Lo anterior se debe a que estamos cambiando lo que se ha venido haciendo durante 25 años. Cambiar esa enseñanza que se hace en las aulas de clase es complejo, en especial hacerlos entender que no somos digitadores de paquetes de contabilidad», dice.
Desde su punto de vista se deben fortalecer los conocimientos de los docentes para que aprendan nuevos aspectos, en especial lo conceptual, mostrar más la realidad de las organizaciones, es decir, «acercar cada día más ese abismo que existe entre la realidad y la academia, en especial cuando esta se encuentra en manos de disciplinas diferentes a las contables», opina Fonseca Vivas.
Para el director del programa de contaduría pública de Uniminuto se deben revisar con cuidado y responsabilidad los planes de estudio, y establecerlos según las necesidades locales y regionales de quienes se prepararán, haciendo convenios con organizaciones empresariales para las prácticas y fortaleciendo el manejo de las matrices de riesgos para la gestión del mismo, «porque esto brinda certeza en el aseguramiento de la calidad de la información».
De igual manera piensa que se debe fortalecer más el compromiso del Ministerio de Educación Nacional en la entrega de registros calificados y de acreditación.
Por su parte Ana María Gaitán, contadora pública y socia de Integral Consultoría Ltda., afirma en entrevista con Actualícese que las instituciones de educación superior están obligadas a asumir el reto de la globalización, y que se requieren centros educativos a tono con la evolución de la profesión contable.
Para Gaitán, las instituciones de educación superior deben ser un vehículo para traer, difundir y divulgar el conocimiento. Por tal motivo, «están obligadas a asumir el reto de la globalización, ya que el conocimiento se encuentra en una evolución constante y, por tanto, requiere que los centros educativos estén a tono con la evolución de la profesión», expresa.
Debido a lo anterior, el compromiso de las instituciones radica en ofrecer un programa de alta calidad, garantizando la competencia de sus docentes frente a los cambios, donde se integre lo académico, lo investigativo y lo laboral.
«Lo anterior es posible llevando a cabo procesos de selección más ácidos y completos, propendiendo por encontrar la vocación en los docentes y futuros estudiantes. A su vez, impartiendo educación moderna con docentes actualizados», explica Gaitán.
Para ella también es importante fortalecer en el estudiante, además de la técnica, las habilidades de comunicación y escritura. Finalmente, «se hace necesario enfocar correctamente y con calidad los diferentes perfiles de un contador; es decir, fortalecer el conocimiento específico en lo tributario, en el aseguramiento de información o en las finanzas desde el punto de vista del mercado, sin dejar de lado la investigación, que deberá estar articulada con las necesidades universales y resultados contundentes», explica Gaitán.
Fundada en el año 2000 con la misión de “elevar el nivel profesional del Contador Público”
