Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
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Recientemente, la Asociación Nacional de Instituciones Financieras, Anif, se lanzó al agua y habló extensamente sobre el tema de la reforma tributaria. Desde la entidad piensan que para los próximos cuatro años el país requiere una nueva reforma, la cual debería tener como objetivo aumentar el recaudo para cubrir los gastos que demandarán las pensiones, la infraestructura y la salud.
Sergio Clavijo, su presidente, cree que para que el Estado cuente con estos recursos, el Congreso debe aprobar una reforma que suba la tarifa general del IVA del 16% al 18%, que prolongue el impuesto al patrimonio, que desmonte el 4 por mil, que aumente en 3% la tarifa efectiva del IMAN, que grave con el IMAN las pensiones elevadas y que ponga a tributar los dividendos recibidos con una tarifa del 5%.
Como lo publica El Espectador, la propuesta para aumentar el IVA se fundamenta en que este incremento aportaría 1% del PIB en recaudo. Lo anterior sería la piedra angular de una reforma tributaria. Sin embargo, dice que poner en marcha un sistema de devolución de este gravamen para la población con menos ingresos resultará complicado, lo cual puede hacer lucir esta iniciativa como regresiva.
En cuanto al desmonte del 4 por mil, sostiene que sacrificar el tributo resta un 0,8% del PIB a los ingresos. Sin embargo, destaca que si el gobierno incluye esta opción, podría profundizarse el acceso a la banca y por ende el mejoramiento de gravámenes de IVA y renta.
Sobre el aumento del IMAN, el recaudo de los hogares en Colombia representa casi un 2% del PIB y que la reforma tributaria de 2012 permitirá aumentar los ingresos del fisco por la vía del IMAN. Sin embargo, podría contemplarse un aumento del 3% en la tasa efectiva del IMAN, lo cual podría conseguir recursos adicionales del 0,8% del PIB. Asimismo, el centro de investigaciones cree que las pensiones deben tributar bajo la figura del IMAN.
En materia de gravar dividendos, Anif propone que estos tengan un impuesto del 5%, evitando la doble tributación ya que de por medio están el impuesto de renta, el gravamen al patrimonio y el CREE que están comenzando a pagar las empresas.
Recientemente en Portafolio, el director saliente de la DIAN, Juan Ricardo Ortega habló sobre la reforma tributaria. «Es inevitable que nos toque hacer unos ajustes para financiar el presupuesto del próximo año, aunque no creo que haya per se la urgencia de una reforma tributaria», manifestó
Agregó que el país va bien, pero el tema de fraudes de omisión de ingresos y que no haya sanción para personas que se le olvidan 16 mil millones de ingresos en un año, como encontramos en algunas de las sociedades relacionadas con InterBolsa, «es algo que Colombia no debería tolerar y que va a tener sanciones penales claras, contundentes, no excarcelables, porque la gente tiene que entender que esconder ingresos es robar».
«Si uno esconde ingresos de 15 mil millones está robando 5.000 millones de impuestos y eso es robarle el futuro al resto de los colombianos, y hay que investigarlo», concluye.
El director ejecutivo de la entidad, Leonardo Villar, dijo en La República que Colombia necesitará la reforma tributaria más grande de su historia si continúa en la tarea de bajar el déficit como lo ha venido haciendo desde 2010. Villar expresó su preocupación por una coyuntura que evidencia menores fuentes de ingreso y gastos no previstos, como los contemplados para el sector salud.
El directivo aseguró que este contexto presiona la necesidad de la «reforma tributaria más grande de la historia de Colombia», que represente al menos 2,2% del PIB. Las cifras de Villar también las sustenta la Asociación Nacional de Instituciones Financieras, Anif, que prevé que el recaudo de los hogares colombianos también debe aumentar.
Según Sergio Clavijo, presidente de Anif, dice que este gobierno deberá aumentar los gastos en salud debido a la Ley Estatutaria de Salud que se expidió hace dos meses. Así mismo, se debe subir el gasto en las pensiones de los colombianos.
Otra de las necesidades que el gobierno debe cubrir es la modernización de infraestructura debido a que es uno de los puntos más débiles que tiene el país para ser más competitivo.
Con esas tres prioridades, aseguró Clavijo, se necesita que se haga una reforma tributaria que genere cerca de dos puntos del PIB en recaudo.
El gobierno la tiene clara y tiene la necesidad de buscar nuevas fuentes de ingreso. “La futura desaparición del 4 por mil y del impuesto al patrimonio, así como la disminución esperada de la producción petrolera, obligan al país a buscar alternativas para reemplazar estos ingresos en el futuro”, dice el Marco Fiscal de Mediano Plazo que se conoció la semana.
Si bien no menciona el tema de la reforma tributaria, a juicio de los analistas, todo apunta a que ese será el vehículo para conseguir más ingresos, de cara a los gastos asumidos y a los compromisos de déficit que establece la regla fiscal. Se espera que este año los ingresos alcancen los 129,9 billones de pesos, mientras que los gastos se calculan en 148,4 billones de pesos.
Este año se pagará la última cuota del impuesto al patrimonio (unos 4,4 billones de pesos anuales), y en el 2015 comienza el desmonte gradual del 4 por mil, con el cual se perciben 5,8 billones de pesos anuales. El otro tema clave es que según las cuentas del gobierno habrá menos recursos provenientes del petróleo ya que la producción de crudo estará por debajo del millón de barriles, se estima una reducción en los precios de la canasta de los hidrocarburos que vende Colombia, y un aumento en los costos de producción.
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