«En Colombia solo se crean empleos en los computadores del DANE»

Dialogamos con Mario Alejandro Valencia, Subdirector de Cedetrabajo y vocero de la Red por la Justicia Tributaria sobre cómo la Reforma Tributaria afectaría la generación de empleo en Colombia y el horizonte que se ve en este ámbito. Es tajante al afirmar que el entorno laboral en nuestro país es lamentable y que se están formando profesionales para que se vayan a realizar actividades de servidumbre en otros países.

Economista con estudios de maestría en Gobierno y Políticas Públicas de la Universidad Externado. Mario Alejandro Valencia, actualmente es vocero de la Red por la Justicia Tributaria en Colombia, Subdirector de Cedetrabajo, miembro del Concejo de Coordinación de la Red de Justicia Fiscal en América Latina y el Caribe y de la Red Colombiana de Acción Frente al Libre Comercio, Recalca. De igual manera se desempeña como profesor de economía de las universidades Externado y Central.

Mes a mes el Gobierno saca pecho al presentar cifras que indican que el desempleo disminuye. ¿Qué tan reales llegan a ser estas cifras?

La única institución oficinal que registra los datos de desempleo es el DANE. Por lo tanto, no hay otra fuente disponible. El punto no es si las cifras son reales, sino que el debate está en si la metodología que se utiliza refleja la realidad de la situación laboral del país. Por ejemplo, para el DANE una persona que trabaja durante una hora a la semana, remunerado o no remunerado, no es considerado como desempleado. De ahí que pueda afirmarse que en Colombia solo se crean empleos en los computadores del DANE.

¿Colombia cuenta con una verdadera calidad de empleos o el Gobierno le hace el guiño al rebusque y la capacidad de sobrevivencia que tienen los colombianos?

El gobierno de Santos se aprovecha de los vacíos que existen en la forma de medir el desempleo y saca pecho porque esta tasa es baja. Por supuesto que en esas cifras no están incluidos los millones de colombianos que sobreviven del rebusque: en un semáforo, vendiendo fruta, revendiendo mercancía en un bus, actividades que en ningún país desarrollado serían consideradas como empleo de calidad. En Colombia, para el gobierno, sí lo son. Es evidente que una familia nunca saldrá de la pobreza a través del rebusque.

Los gremios y empresarios vieron con malos ojos la Reforma Tributaria. ¿De qué forma esto puede afectar que exista generación de empleo?

La reforma del 2012 le metió la mano al bolsillo a los trabajadores y la de 2014 a los pequeños y medianos empresarios nacionales. Es claro que la estrategia del gobierno de Santos es atacar a la producción local para estimular más importaciones. El impuesto a la riqueza (antes impuesto al patrimonio), afecta a los productores que tienen activos fijos, castigándolos con más impuestos. Mientras tanto, beneficia a los comerciantes que tienen inventarios importados. En economía, es del ABC que mientras menos producción nacional exista, menos empleos de calidad se generan.

Con la creación de impuestos o el cambio de nombre de los mismos se cambian las reglas de juego para las empresas. ¿Esto puede ser una causa para que existan despidos en las empresas?

Considero que los despidos en las empresas están más relacionados con la dificultad que existen en Colombia para producir. La política industrial ni se le pasa por la cabeza al gobierno, la política de competitividad es un discurso sin ningún contenido y la política del agro es la de extranjerización de la tierra y legalización de baldíos, entonces producir un kilo de alimentos en Colombia o un bien manufacturado es un acto de heroísmo. Si a eso se suma que la estructura tributaria está diseñada para colmar de beneficios al capital financiero especulativo y a los monopolios, el resultado es que un empresario considerará que es más fácil importar que producir. De esta forma, los empleos que se generaban en la producción se eliminan y es falso que estos empleos se reemplacen en el comercio. Colombia se está convirtiendo en un país de revendedores y los resultados negativos ya están a la vista.

La Reforma Tributaria puede hacer que muchas empresas extranjeras quiten los ojos de Colombia. ¿De qué forma esto puede afectar a profesionales que buscan oportunidades laborales en otras partes?

Yo no creo que las empresas extranjeras estén preocupadas por la reforma. Los beneficios tributarios, que suman 9,2 billones de pesos al año, están intactos. Recordemos que el 75% de la inversión extranjera llega a Colombia se dirige a actividades extractivas y tiene tantos beneficios económicos, que no es una exageración afirmar que estamos pagándoles para que se lleven nuestros minerales. ¿Por qué se irían? Por otro lado, las oportunidades laborales en sectores extractivos son muy limitadas. Las multinacionales traen a sus propios equipos de profesionales. Las verdaderas oportunidades deberían estar en la producción industrial y agraria.

¿Cómo describiría actualmente el entorno laboral en el país?

El entorno laboral en Colombia es lamentable. Lo veo a diario con mis estudiantes universitarios. Ninguno quiere quedarse en el país, porque sencillamente no hay oportunidades. Entonces estamos formando profesionales para irse a realizar actividades de servidumbre en otros países. Es una pérdida enorme para el país; una diáspora de cerebros. Lo peor de todo es que como ya no producimos casi nada, en unos años vamos a perder el conocimiento de cómo hacer las cosas, y recuperar ese conocimiento nos tomará mucho tiempo y esfuerzo.