Cuando la empresa requiere que un trabajador labore en otra ciudad distinta a su residencia, debe costear su traslado, pero los gastos de regreso están condicionados a ciertos requisitos, veamos cuales.
Cuando el empleador decide de mutuo acuerdo trasladar de ciudad al trabajador, la empresa debe sufragar unos gastos de ida y regreso, pero, ¿qué pasa con dichos gastos cuando el trabajador decide voluntariamente cambiar de ciudad?