Este artículo fue publicado hace más de un año, por lo que es importante prestar atención a la vigencia de sus referencias normativas.
Actualmente, muchas empresas están realizando su cierre contable y elaborando los estados financieros. En este período, las entidades deben revisar todas las cuentas que tienen registradas en su contabilidad, como analizar el deterioro de sus inventarios calculando el valor neto de realización.
Los inventarios se miden en la fecha de cierre por el menor valor entre su valor en libros y su valor neto de realización.
En esta publicación explicamos en qué consiste dicho valor neto de realización y cuáles son sus efectos sobre los estados financieros.
En la siguiente publicación se expone una serie de recomendaciones clave al momento de reconocer y medir en los estados financieros de una empresa los activos que califican como inventarios, los cuales están regulados por la sección 13 del Estándar Internacional para Pymes si se trata de una empresa del grupo 2.
¿Qué efectos contables tiene el valor neto de realización en la partida de los inventarios?
Los inventarios son activos que la entidad posee para la venta, que están en proceso de producción o en forma de materiales o suministros. En la presentación del estado de situación financiera la entidad debe considerar el valor por el cual podría realizarlos (venderlos) al cierre del período contable.
Aunque por regla general los activos tienden a perder valor por depreciación o deterioro, también se encuentran en el mercado casos de activos cuyo valor es tendente al aumento, tal es la situación del oro que configura el inventario principal de empresas dedicadas al negocio de la joyería.
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