Uno de los efectos más negativos que la crisis económica causó en el mercado laboral colombiano es que la brecha de género se sigue extendiendo.
Más de 128.300 empleos se han protegido durante el impacto de la pandemia por gestión de los inspectores laborales.
De los 75 cargos que presentan brecha de déficit de programas educativos requeridos, el 52% son universitarios, el 31% son posgrados y el 17% corresponden a programas técnicos o tecnólogos.
Incrementar el salario mínimo, de forma desbordada, podría profundizar más la brecha entre la productividad y el salario.
También se podrían incrementar las cifras de desempleo e informalidad.
¿De qué forma la negociación del salario mínimo para 2021 podría afectar la creación de empleos?
Según el informe sobre el comportamiento del mercado laboral de septiembre, presentado por el Dane, el empleo en Colombia continúa recuperándose.
El ministro del Trabajo, Ángel Custodio Cabrera y el director de la OIT, Guy Ryder, anunciaron el apoyo que brinda el organismo para la Misión de Empleo, creada para mejorar el desempeño del mercado laboral.
Según la directora de la AmCham Colombia, María Claudia Lacouture, nuestra ley laboral es poco flexible e impide tener facilidades, otras opciones y oportunidades a quienes están sin trabajo.
Mercado laboral se está reactivando de forma paulatina por la reapertura gradual de varios sectores económicos, lo que hizo que se recuperaran 3,1 millones de empleos entre abril y agosto.
Servicio Público de Empleo -SPE- busca generar espacios para interactuar con agencias y bolsas de empleo autorizadas.
Agencia Pública de Empleo del Sena realizará, entre el 28 de septiembre y el 2 de octubre, Expoempleo virtual Sena 2020, la primera feria de empleo que dispone 20.000 vacantes para todos los colombianos.
Plan del Gobierno nacional busca generar al menos 775.000 empleos a través de inversión privada, incentivos fiscales e inversión pública.
Es importante que de la Misión de Empleo se desprendan recomendaciones que resuelvan las rigideces estructurales que limitan la generación de empleo formal y el crecimiento de la productividad. Su mayor desafío será lograr consensos alrededor de las reformas que no pueden seguir siendo aplazadas.