En Estados Unidos, como debería ser en Colombia, la información tributaria no proviene de la contabilidad financiera, por tanto el auditor puede opinar sobre los estados financieros y sobre los denuncios rentísticos sin impedimento.
En Colombia, aunque la Dian diga lo contrario, la Ley 1819 de 2016 aumentó la dependencia.
Si se aplicara el principio de la buena fe, no tendría por qué exigirse el juramento. Hoy como ayer se trata de echar mano de las consecuencias penales. Los bienes de una persona forman parte de la prenda de los acreedores. Sus relaciones con otras entidades podrían indicar conflictos de interés.
Crisis tras crisis, con o sin culpa, los auditores han tenido y han decidido aumentar la calidad de sus servicios. Como lo venimos planteando, la cuestión consiste en nuestro nivel de cultura contable, cuya inducción, mejora y conservación depende de la propia comunidad profesional y de nadie más.
Recordemos que no hay equivalencia entre lo ético y lo legal. No todo lo ético es legal, ni todo lo legal es ético. Se pretende que las bases de las normas legales se encuentren en la ética y la moral, pero puede suceder, y sucede, que ello no sea así.
El proceso de auditoría suele abarcar desde el proceso de planeación hasta la evaluación de control, las pruebas sustantivas y la conclusión, además del análisis de otros elementos que determinan de manera correcta los riesgos a partir de una concepción apropiada de la materialidad.
En muchas ocasiones se generan dudas sobre la preparación y, sobre todo, la presentación, ante las juntas de socios o asambleas de accionistas, de los documentos solicitados por el artículo 46 de la Ley 222 de 1995, como son el informe de gestión, los estados financieros y el proyecto de distribución de utilidades.
A continuación, se mencionan aspectos relacionados con la contratación y el nombramiento de un revisor fiscal, regulado, principalmente, por el artículo 203 del Código de Comercio.
A continuación, se mencionan los principales aspectos relacionados con la contratación y el nombramiento de un revisor fiscal.
También se analiza qué tipo de sanciones recaen sobre esta persona cuando no actúa en debida forma.
Para realizar un adecuado dictamen en los trabajos de auditoría o revisoría fiscal es importante el uso de indicadores financieros. Estos se generan con la información o rubros de los estados financieros, arrojan información que clarifica la situación de la empresa y permiten iniciar con el pie derecho la toma de decisiones.
A continuación, se relacionan las principales funciones y responsabilidades que recaen, directamente, sobre aquellas personas que ejercen como revisores fiscales en las empresas.
La NIA 320 establece la responsabilidad del auditor para aplicar el concepto de materialidad, y la explica como los errores u omisiones importantes en la estructura financiera de la compañía que, de forma individual o acumulada, podrían influir en la toma de decisiones de los usuarios de la información.
La NIA 300 indica que la auditoría de los estados financieros requiere una planificación apropiada, que permita trazar un camino al logro de sus objetivos de manera eficiente. El auditor tiene la responsabilidad de planear esta auditoría para que sea efectiva.